Hablemos de VIH
Por: Jhonatan Morales
Instagram: @jhonathmorales
En esta ocasión quiero platicar con ustedes del VIH, virus inicialmente conocido por sus siglas en inglés como GRID (Gay-Related Immune Deficiency).
Los tiempos eran otros, por lo que cinco años fueron necesarios para que la población se diera cuenta que el virus no afectaba exclusivamente a homosexuales, por lo cual su nombre cambió a Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH).
Desde 1981, año en el que fue descubierto, hasta el día de hoy, se tienen aproximadamente registros de 40 millones de personas que viven con él.
VIH en la actualidad
Los tiempos han cambiado, es verdad, sin embargo, el estigma del VIH sigue manifestándose fuertemente hacia las personas que conviven con él. Un porcentaje importante de nuestra sociedad, por falta de información o desconocimiento, continúa discriminando, lo que imposibilita que la mayoría de las personas viviendo con VIH puedan visibilizarse como tal y ser tratadas con respeto y dignidad.
Para no retroceder en el tiempo, hablemos de VIH, eliminemos estigmas. Es necesario mencionar que el VIH y el SIDA no son lo mismo: vivir con VIH bajo el tratamiento adecuado (antirretrovirales) impide que el virus evolucione en alguna otra enfermedad, mientras que el SIDA es la enfermedad causada por el VIH, en la cual las defensas de nuestro cuerpo no son lo suficientemente fuertes para hacer frente a otras infecciones.
Es recomendable que si tienes una vida sexual activa, sin importar tu orientación sexual, nos hagamos pruebas de salud sexual cada seis meses o después de estar en una relación sexual de alto riesgo. En caso de obtener un resultado positivo, no es el fin del mundo, es necesario que empieces con el tratamiento de inmediato para no transmitir el virus a tus parejas sexuales (siempre y cuando sigas al pie de la letra el tratamiento y tu carga viral sea indetectable) y para mejorar tu nivel de salud al incrementar tu número de defensas.
Si vives con VIH o eres detectado positivo, sí puedes conocer a alguien, sí puedes enamorarte y sí puedes seguir teniendo relaciones sexuales.
Cuídandote, siguiendo tu tratamiento y manteniéndote con una carga viral indetectable ni tú ni tus parejas (vivan con el virus o no) deben de preocuparse. Y por los besos o las caricias, no tienes que temer, el virus muere casi al momento de entrar en contacto con el aire.
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