Novak Djokovic, el tenista con más detractores en el mundo
Por: Cristóbal Morales Ramírez
Twitter: @Cristofleon
Novak Djokovic es, hoy por hoy, el mejor tenista del mundo, quizá hasta uno de los mejores en la historia.
Ha sido capaz de convertirse en la mayor competencia de Roger Federer y Rafael Nadal, al ubicarse como el tercer máximo ganador de Grand Slams en la historia.
Sin embargo, a pesar de todo el cartel que posee como jugador, hay algo por lo que no termina de convencer a los aficionados del deporte blanco: su poco o nulo carisma.
Djokovic es un destacado profesional desde hace más de 15 años.
Aunque nos ha regalado grandes momentos dentro del césped, la arcilla y el cemento, su gen competitivo y carácter lo hacen un jugador complicado durante los partidos y las conferencias de prensa.
¿La personalidad de Djokovic es su peor enemigo?
Todo esto se debe principalmente a su familia, quienes son los primeros en cuestionar si en realidad Federer y Nadal son los mejores de la historia, en comparación al nivel de Nole.
Situación que nunca cae bien dentro de expertos y aficionados.
Por mencionar algunos casos, Djokovic se ha quejado de jugadores por “llorones” y “poco profesionales”.
Pero lo que nunca comenta es lo hablador que suele ser durante los juegos y cómo su familia opina sobre la actitud de la ATP contra Novak.
Su familia incluso ha mencionado que Federer ya debería retirarse “por viejo” y que si no lo ha hecho, es porque está desesperado por ampliar su récord de Grand Slams, con tal de que el serbio no le dé alcance.
Fueron comentarios que no cayeron nada bien en el gremio de tenistas de la ATP, pues incluso, ha sido sancionado por las declaraciones de su familia, en concreto, por sus padres.
El torneo que propagó el COVID
Por sí la cosa no era suficiente, en plena pandemia por Covid 19, Novak Djokovic, tuvo la brillante idea de organizar un torneo “benéfico” de tenis que resultó en un completo desastre.
Al darse a conocer que más de 3 tenistas y más de 100 seguidores resultaron portadores del virus. Djokovic y su esposa, fueron algunos de los infectados, por lo que son los principalmente señalados.
La ATP tomó cartas en el asunto y pese a que la gran mayoría pujaba por una duro castigo contra el nacido en Serbia, Djokovic sólo fue sancionado de manera económica.
A su vez, fue excluido de los dirigentes del gremio de jugadores ATP.
Razones sobran para poder generar una no simpatía contra Nole pero, ¿será que alguna vez sus logros en la cancha dejen de lado todos los escándalos que vive este extraordinario tenista?
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