Los pretextos más absurdos para no trabajar

Por: Jesús Orellana

Twitter: @SemElChabacano

Antes que nada, levanta la mano si alguna vez has usado un pretexto ¡para no trabajar!

De vez en cuando a todos nos invade la flojera de no realizar alguna tarea, lo cual provoca que pensemos en mil y un pretextos para no hacerla, ¿apoco no?  

Ahora bien, la realidad es que la flojera nunca es buena, pues daña nuestra productividad y nos conduce por un camino de irresponsabilidad y ocio puro.

Con el propósito de divertirnos, vamos a platicarte algunos de los pretextos más absurdos y falsos.

Conoce los pretextos más absurdos para no trabajar

1.- Las peores tragedias solo te pasan a ti

Gracias a la llegada del COVID-19, hoy en día la salud se ha tornado más que nunca en un privilegio, por lo que síntomas como la gripe, tos y fiebre son considerados de alto cuidado.

Sin embargo, estos síntomas también se han utilizado desde siempre como excusa clásica para no ir al trabajo o escuela. 

Algunas personas son tan extremistas en su pretexto que parece que estas pobres almas son víctimas de las peores tragedias; no sólo les da gripa, también se les junta con migraña, diarrea y de paso hasta se les muere la abuelita, todo el mismo día. 

El universo entero conspira en su contra para que no puedan trabajar, pero sí les ayuda para que puedan disfrutar de un día libre. ¿Se les hace familiar este tipo de pretextos?

 2.- “¿Apoco sí tengo que venir a laborar todos los días?”

Este es un pretexto utilizado más por los jóvenes que apenas están incursionando en el mundo del trabajo. 

Para muchas personas es obvio que la mayoría de las empresas requieren una asistencia de entre 5 a 6 días de la semana y que se cumplan con cierto número de horas; sin embargo, para algunos jóvenes que empiezan, esto es una gran novedad.

Estas personas son tan “ingenuas” que faltan al trabajo y su pretexto es que no sabían que deben apegarse y cumplir con un horario. Es más, algunas hasta te dicen cuánto tiempo puedes contar con sus talentos y quieren armar horarios a su medida, pues tienen cosas más importantes por hacer.

3.- “No terminé el trabajo porque estaba muy cansado”

Tener un trabajo implica un compromiso: se deben entregar o realizar las tareas, sí o sí.

No obstante, para algunas personas no es así y son víctimas del cansancio, por lo que sin mayor preocupación dejan el proyecto a medias y su pretexto es que estaban agotadas. ¡Así es! No les importa las consecuencias negativas que le puedan traer a la empresa, todo por culpa de su pretexto absurdo.

4.- “El cuerpo no me respondió, por eso no me pude despertar”

Estas pobres almas son clientes frecuentes de las maldades de su cuerpo, son víctimas de su sueño que, desafortunadamente, no les permite escuchar la alarma para poder ir al trabajo o llegar a una cita importante con clientes…¿Quién más ha sido víctima frecuente de sus sueños y de su cuerpo?

5.- “Hoy tengo un evento importante, ¡Es el cumpleaños de un amigo!”

Festivales, compromisos familiares y eventos sociales para algunas personas son considerados no como pretextos, sino como emergencias que deben atenderse en tiempo y forma; así, se toman la libertad de no ir al trabajo, dejarlo a medias o salir antes sin autorización del encargado.

¿Te gustaron los pretextos más absurdos para no trabajar?

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