Conoce el origen de la frase “echarse un coyotito”

Por: Sabiondo Hediondo

¿Alguna vez te has “echado un coyotito”? Seguro que sí. 

Todos hemos usado frases o dichos populares para ejemplificar o burlarnos de alguna situación, de una acción, de un objeto, persona o animal.

Usamos frases como “Firulais” para referirnos a los perros callejeros, “chiflando y aplaudiendo” para detener a las personas de mostrar su afecto en público y “ya chupo faros” para indicar que cierta persona ha muerto.

Los anteriores son algunos ejemplos del gran repertorio de frases o dichos populares, pero en esta ocasión platicaremos el origen de la frase “echarse un coyotito”.

¿Te ha pasado que después de comer, te entra la sensación de cansancio y te echas una siesta?

Pues al acto de dormirse después de la merienda se le llama “echarse un coyotito”; o a lo mejor, también a dormir durante la tarde, en el transporte público, en tu hora de comida.

¿De dónde surge “echarse un coyotito”?

Se hace referencia al coyote porque este animal duerme por el día varias siestas y caza por las noches, teniendo fama de ser muy dormilones.

“Echarse un coyotito” tiene sus beneficios, pues puede prevenir varias enfermedades cardíacas, aportar energía, estimular la creatividad y el aprendizaje, así como mejorar tu estado de ánimo.

Chabacanos, ya saben, si los cachan durmiéndose en horario de trabajo después de la comida, solo digan que querían “echarse un coyotito”, y de pasó, le platican a sus compañeros o jefes el origen de esta frase tan popular.

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